Quiero la casa

La gente no es inocente. Nos matan a la gente, porque tenemos una naturaleza pecaminosa. Queremos que muchas cosas son para bendecir vidas pero no aman a otras personas.
Hay muchas veces cuando una persona recibe un mejor trabajo. Esa persona compra una casa. Entonces mucha gente querrá un mal acontecimiento en la vida bendita persona. Esto está mal pero es común.
La gente está mala y la naturaleza pecaminosa controlar a la gente. Dios desea que traer bendición y no una maldición.
Tenemos que bendecir a la gente. Una persona puede bendecir a una persona cuando Jesús vive en el corazón de una persona.
Jesús murió en la cruz y la muerte conquistado. Si una persona se arrepiente de sus pecados y seguir a Jesús. Entonces el Espíritu Santo va a transformar el corazón.
Cada persona es un pecador. Nos merecemos el infierno. Tenemos necesidades.
La persona que sigue a Jesús hay que animar a seguir al Señor.
La persona que rechaza a Jesús se va al infierno. Esa persona necesita el evangelio. El corazón redimido tiene que explicar el concepto de Jesús. Que hay un cielo y el infierno. La única esperanza es el arrepentimiento y la cruz de Jesús.

Proverbios 14:21

 Es un pecado despreciar al prójimo;
    ¡dichoso el que se compadece de los pobres!